Me gusta pensar que estás sonriendo...

domingo, 31 de octubre de 2010

Ya no me importa nada

El hedor intenso a bilis penetrando en tus fosas nasales y devorándote por dentro. La sensación de húmeda calidez al apoyar tu mano sobre el suelo empapado. Te despides del significado del término equilibrio al sentir como tu pie se torna frágil al impactar contra el suelo. Sólo te duele saber que no existen brazos que te levanten, solo ojos bizcos que observan en silencio, un silencio roto por ligeros murmullos que recuerdan a risas silenciadas... Tú, en tu soledad rodeada de gente.
En tu mente se acumulan las imágenes, aquellas que te llevaron a un estado que jamás podrías describir con palabras. No sabes qué quieres hacer de tu vida, solo quieres desaparecer sin dejar rastro. No existe nada que merezca que te levantes, nada que valga la pena.
No te gustas.
Estas lleno de odio.
Odio a todo lo que eres.
Intentas explicarte.
Nadie lo entiende, estas solo.
Solo pero acompañado.
Acompañado por un sentimiento profundo.
Un rencor visceral a aquello que representas.
Pero he de confesar una cosa... YA NO ME IMPORTA NADA.

lunes, 11 de octubre de 2010

Pesado.


El pasado me persigue, no me deja avanzar, siento su aliento en mi nuca cuando me susurra, cuando me suplica que vuelva a ser como entonces. Pero al girar mi cabeza me encuentro con un rostro vomitivo que deja entrever que algún día fue hermoso.
El paso del tiempo no perdona a quien queda anclado,pero tampoco ayuda a quien intenta huir de él apresurado.
Te confieso, amigo mío, que no puedo evitar ignorarte, por aquello que fui y que ya no quiero ser más. No me mandes señas para volver a atraparme.
Pasado, no intentes convertirte en mi futuro.